El imaginario colectivo relaciona la robótica con Japón. No obstante, hay un país que quiere adelantarlo en el desarrollo de la tecnología del futuro: China. Su presidente, Xi Jinping, ha incluido la robótica en el ambicioso plan Made in China 2025, que pretende convertir al gigante asiático en unasuperpotencia tecnológica capaz de innovar. Según la Federación Internacional de Robots, el año que viene China comprará el 40 % de todos los robots que se produzcan en el mundo.
Los expertos debatieron sobre estas cuestiones en la Conferencia Mundial de Robótica celebrada en Pekín y coincidieron en señalar que los robots no deben ser considerados una amenaza. Al contrario, los industriales permitirán que el ser humano se concentre en el conocimiento y el ocio, mientras que otros ya hacen labores domésticas, cuidan de los niños o suplen las carencias afectivas de una sociedad envejecida e individualista. China ya fabrica no solo aspiradores robóticos, sino perros de metal y plástico con cámaras para supervisar a niños. Otros, pensados para ancianos o enfermos, incorporan sensores para medir las constantes vitales y llamar a un teléfono de emergencias.
Fuente: La voz de Galicia