La visión artificial es una de las ramas tecnológicas más demandas en el mundo de la robótica y los diseños industriales automatizados. Gracias a ella, las máquinas son capaces de ver su entorno y tomar decisiones en base a las imágenes que captan.
Esto puede parecer futurista, pero lo cierto es que desde hace años esta ciencia se ha estudiado e implementado con éxito en sectores de de todo tipo, con excelentes resultados.
Demos un recorrido por algunas de las aplicaciones de la visión artificial que se encuentran en tendencia y que quizás desconozcas.
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Aquí dejamos un listado con 8 aplicaciones de la visión artificial:
Los sistemas de visión combinados con la potente capacidad de los ordenadores para comprender patrones y encontrar anomalías han beneficiado enormemente al sector médico. La detección de tumores y la participación asistida de robots de maquinaria de alta precisión en operaciones mínimamente invasivas son un gran ejemplo de la utilidad de esta tecnología.
Esto se puede extrapolar a las fábricas de este mismo sector, donde la manipulación de ciertos elementos puede llegar a ser peligrosa o requiere de mucha habilidad. Dentro del ambiente microscópico, los sistemas de visión artificial pueden llegar a reconocer patrones de forma super eficaz.
Los sistemas de seguridad basados en biométrica no son algo nuevo, pero los avances tecnológicos han hecho posible que seamos capaces de reconocer de manera mucho más fiable características humanas, esto tiene dos vertientes:
Gracias a estas características podemos automatizar el control de acceso a áreas susceptibles de cualquier industria, durante las 24h y en condiciones en las que el ojo humano no podría (por condiciones de luz o ambientales, por ejemplo).
Muchos robots y maquinarias automáticas eran vistas con temor por lo peligrosas que pueden llegar a ser. Gracias a las capacidades de detección de entorno, el sistema de visión artificial puede reconocer cuando un humano se encuentra en exposición de riesgo (como un brazo robótico en el lugar equivocado) y detener el trabajo inmediatamente.
Este es otro de los sectores donde más se explota por ahora esta característica de la robótica. En segundos, haciendo uso de sensores especiales un robot puede optimizar todo el proceso de selección y de control de calidad tanto en piezas del sector automotriz, como frutas y alimentos defectuosos en los sectores alimenticios de todo tipo.
Dos de los procesos más demandantes dentro del control logístico pueden ser atendidos de manera eficiente a través de soluciones colaborativas. Los sistemas cobots pueden resolver complejos problemas de picking a través de cámaras, seleccionando de manera óptima y diferenciando productos en lotes, mientras que pueden llegar incluso a embalar o empaquetar productos de forma automatizada añadiendo los accesorios correctos.
Un solo escaneo es suficiente para que una maquinaria especializada sea capaz de diferenciar dos productos diferentes, que por error estén compartiendo algún segmento dentro de la línea de producción. Esto sirve también para eliminar falsos positivos, comunes en las líneas de tamizado convencional.
Podríamos, por mencionar cualquier ejemplo, eliminar residuos del campo de siembra como piedras y trozos de ramas muy pequeños antes de llegar a la sección de empaquetado. Esto es particularmente útil en la industria alimenticia y minera.
Cada vez son más las industrias del trabajo no estandarizado quienes buscan soluciones que la maquinaria existente no aporta. Los sistemas de visión artificial son capaces de detectar y medir piezas, diseños y patrones, llevando acabo precisas acciones en base a ellos. El ensamblaje, recorte y soldadura son actividades que se benefician enormemente de esto y pueden ejecutar inteligentes maniobras con una precisión macrométrica.
Ahora las maquinas saben leer. Los protocolos para lectura de caracteres, símbolos y datos basados en cámaras que implementen códigos de reconocimiento de patrones son cada vez más efectivos. Estos pueden interpretar o reconocer casi cualquier elemento para el que estén entrenados, sin importar la forma en la que se muestre dicho elemento o la tipografía que presente.
Saliendo un poco del sector productivo, la comercialización de los productos también se ha beneficiado de enormemente de la visualización computarizada. Análisis de comportamiento de los clientes, control de inventario, detección de visitantes frecuentes, mapas de calor del recorrido, entre otros…
Poderosa capacidad de procesamiento sumada a la habilidad de poder ver e interpretar su entorno, da la capacidad a las maquinarias de conocer y enseñarnos aspectos sobre los consumidores que sería imposible descubrir por nuestra cuenta.
Cada vez son más las empresas que buscan añadir ese plus de calidad que les permita posicionarse como referentes de marca en sus respectivos mercados, lo que ha sido posible gracias a la aplicaciones de la visión artificial.
Estos sistemas más avanzados han permitido mejorar enormemente el producto final y la eficiencia reduciendo costes.
La industria del éxito hoy apunta hacia un futuro más automatizado y colaborativo de la mano con las nuevas habilidades de la tecnología, por lo tanto, es nuestra responsabilidad implementarla correctamente para mejorar el entorno en el que vivimos.